Aunque los términos «gestión de parches» y «gestión de vulnerabilidades» suelen utilizarse indistintamente, no son el mismo proceso. La gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades son dos procesos que van de la mano para garantizar que una infraestructura de TI sea segura, eficiente y esté actualizada.
Compara la gestión de parches con la gestión de vulnerabilidades y descubre por qué ambas son esenciales para un entorno informático seguro.
¿Qué es la gestión de parches?
La gestión de parches es el proceso de detectar, probar e implantar parches de sistemas operativos o aplicaciones en los endpoints. Estos parches garantizan que los dispositivos utilicen las versiones más recientes de los sistemas operativos y las aplicaciones; básicamente, mantienen los endpoints seguros, actualizados y funcionando correctamente.
¿Por qué es importante la gestión de parches?
Los dos objetivos principales de la gestión de parches son proteger los dispositivos y mantenerlos actualizados. Cuando se descuidan los parches, los endpoints quedan indefensos y expuestos a ciberamenazas y ataques modernos. Basta con echar un vistazo a algunas de las principales consecuencias de no parchear un software para darse cuenta de lo importante que es la gestión de parches para cualquier entorno informático.
¿Qué es la gestión de vulnerabilidades?
La gestión de vulnerabilidades es el proceso de identificación, organización, notificación y corrección de vulnerabilidades. El objetivo principal de la gestión de vulnerabilidades es apoyar los esfuerzos de ciberseguridad minimizando las posibles amenazas y previniendo los ataques.
¿Por qué es importante la gestión de vulnerabilidades?
A diferencia de la gestión de parches, la gestión de vulnerabilidades solo tiene un propósito: proteger los endpoints de vulnerabilidades y ciberataques. Es un componente esencial de cualquier programa de ciberseguridad eficaz.
Gracias a las herramientas y procesos de gestión de vulnerabilidades, las organizaciones pueden hallar, clasificar y resolver vulnerabilidades que, de otro modo, habrían pasado desapercibidas en los dispositivos. Si las vulnerabilidades no se detectan ni se resuelven, crean brechas que los ciberdelincuentes pueden aprovechar para sus ataques. Estas fisuras pueden dar lugar a robos y pérdidas de datos, amenazas de ransomware y otros peligrosos ciberataques que pueden dañar considerablemente una empresa y su reputación.
Gestión de parches vs. Gestión de vulnerabilidades
La forma más fácil de comparar la gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades es mostrar sus ciclos de vida o sus funciones y procesos principales y luego observar las diferencias y similitudes.
Aunque los ciclos de vida de la gestión de vulnerabilidades y los ciclos de vida de la gestión de parches pueden tratarse en profundidad, aquí solo repasaremos los pasos básicos de cada uno.
Funciones básicas de la gestión de la vulnerabilidades:
- Encontrar e identificar vulnerabilidades
- Analizar las vulnerabilidades
- Categorizar las vulnerabilidades
- Supervisar las vulnerabilidades
- Corregir las vulnerabilidades
- Verificar que las vulnerabilidades se han corregido
Funciones básicas de la gestión de parches:
- Elaborar un inventario informático
- Priorizar los parches
- Crear políticas de parcheo
- Supervisar y probar los sistemas de parcheo
- Desplegar parches
- Verificar el despliegue de parches
- Crear informes de parches y documentación
3 similitudes clave entre los ciclos de vida de la gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades
Tres pasos del ciclo de vida que tienen en común tanto la gestión de parches como la gestión de vulnerabilidades son:
1) Categorización
Tanto la gestión de vulnerabilidades como la de parches requieren una categorización para funcionar correctamente. Para la gestión de vulnerabilidades, la categorización se utiliza para evaluar y organizar las soluciones en función de su gravedad. Esto ayuda a los equipos de TI a determinar qué vulnerabilidades deben abordarse en primer lugar.
En el caso de la gestión de parches, la categorización se utiliza para clasificar y organizar los parches, de modo que los equipos informáticos puedan determinar cuáles deben desplegarse inmediatamente.
2) Supervisión
Desde el RMM hasta la gestión de parches, casi todos los procesos informáticos requieren algún tipo de supervisión. En el caso de la gestión de parches, el objetivo de la supervisión no es solo gestionar el proceso de aplicación de parches, sino también estar atento a los nuevos parches o vulnerabilidades de los proveedores. La supervisión tiene un significado diferente para la gestión de vulnerabilidades y consiste en supervisar continuamente los sistemas para detectar las vulnerabilidades en cuanto aparecen.
3) Verificación
Tras haber remediado una vulnerabilidad, un equipo de TI no puede estar tranquilo hasta que no verifique que ese punto débil se ha corregido realmente. Durante el proceso de aplicación de parches, los administradores no pueden estar seguros de que un parche se ha desplegado correctamente hasta que no reciben la confirmación.
3 diferencias clave entre los ciclos de vida de la gestión de parches y de la gestión de vulnerabilidades
Tres pasos del ciclo de vida que son exclusivos a la gestión de parches o a la gestión de vulnerabilidades son:
1) Políticas de parcheo
A diferencia de la gestión de vulnerabilidades, la gestión de parches gira en torno a la creación de políticas de parcheo. Estas políticas determinan qué dispositivos se parchearán, cuándo, con qué frecuencia y otros detalles similares. Es un paso completamente exclusivo a la gestión de parches y no existe dentro de un ciclo de vida de gestión de vulnerabilidades.
2) Análisis de vulnerabilidades
Una vez detectadas las vulnerabilidades, corresponde al equipo de seguridad analizarlas y encontrar soluciones. Este análisis, aunque es fundamental para la gestión de vulnerabilidades, no tiene cabida en un proceso de gestión de parches.
3) Despliegue de soluciones
Aunque algunas vulnerabilidades pueden resolverse desplegando un parche, Heimdal afirma que «en función del nivel de vulnerabilidad, pueden emplearse distintos métodos para eliminar la amenaza». Esto significa que un sistema de gestión de vulnerabilidades puede desplegar otros métodos para ocuparse de los puntos débiles. La gestión de parches se centra únicamente en el despliegue de parches o actualizaciones y nada más.
Cómo trabajan conjuntamente la gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades
La gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades trabajan juntas para respaldar un entorno informático seguro y eficiente. Con un sistema eficaz de gestión de parches, los equipos de TI mantienen los dispositivos al día con las últimas actualizaciones, que mejoran la seguridad y la funcionalidad de los endpoints.
Mediante la gestión de vulnerabilidades, los equipos de TI pueden detectar y corregir proactivamente las vulnerabilidades antes de que se conviertan en amenazas graves. Solo mediante el uso conjunto de estos dos elementos las empresas pueden garantizar que sus dispositivos permanecen seguros e intactos, independientemente del frente que elijan los ciberdelincuentes para atacar.
Por qué debes utilizar conjuntamente la gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades
Los MSP y los departamentos de TI utilizan conjuntamente la gestión de parches y la gestión de vulnerabilidades para proteger los endpoints de ciberamenazas y ataques. Si los equipos de TI solo aplican uno de estos procesos, se crea un punto débil que los ciberdelincuentes pueden aprovechar.
Por ejemplo, si un equipo se centra únicamente en la gestión de parches y descuida la gestión de vulnerabilidades, tendrá menos probabilidades de identificar y corregir rápidamente las vulnerabilidades cuando aparezcan.
La misma situación podría darse también con la gestión de parches. Si un equipo de TI centra toda su atención en la gestión de vulnerabilidades, el resto de software que queda sin parchear genera graves consecuencias que habrá que tratar.
Conclusión
En definitiva, el uso conjunto de la gestión de vulnerabilidades y la gestión de parches es tu mejor opción para proteger tu infraestructura de TI. Si tu actual sistema de gestión de parches es lento, ineficaz o difícil de usar, es hora de pasarte a NinjaOne. La gestión de parches de NinjaOne automatiza tus procesos de aplicación de parches y te quita trabajo. Conoce más sobre Ninja Patching y puede ayudar a tu equipo de TI con esta prueba gratuita.