Una red cerrada, también llamada red privada, es aquella en la que sólo se permite la conectividad a los usuarios autorizados. Generalmente, una red cerrada utiliza routers de firewalls para restringir su uso a un número limitado de personas.
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¿Por qué tener una red cerrada?
A diferencia de una red abierta, que se caracteriza por su naturaleza descentralizada, una red cerrada es más segura porque minimiza la exposición a amenazas externas y otras vulnerabilidades de seguridad. Una red cerrada suele tener tres propiedades para serlo:
- Estrictos controles de acceso: sólo los usuarios verificados de la red pueden conectarse, normalmente mediante estrictos protocolos de autenticación y permisos de usuario.
- Mayor nivel de privacidad de los datos: las redes cerradas ofrecen un mayor nivel de privacidad de los datos debido a su naturaleza restrictiva.
- Aislamiento de la red: una red cerrada está aislada de las redes públicas. Dependiendo de cómo esté diseñada la red, este aislamiento puede ser físico o lógico.
¿Por qué tener una red cerrada?
La principal razón por la que una organización puede querer utilizar una red cerrada es una mayor seguridad. Con menos puntos de entrada, una empresa reduce significativamente su riesgo de ciberataques y mejora su postura general de ciberseguridad .
Una red cerrada también puede ser importante en tu gobernanza de datos y estrategias de cumplimiento, especialmente en lo que respecta a cumplir y mantener diversas normativas de privacidad de datos, como el GDPR o la HIPAA. Dependiendo del servicio o producto que ofrezcas y del nivel de privacidad que propongas a tus clientes, una red cerrada puede ser una buena opción para cumplir estrictamente esta normativa.
Además, una red cerrada permite un mayor control, lo que puede contribuir a una mejor gestión de los recursos y los datos.
Desventajas de una red cerrada
Las redes cerradas pueden resultar difíciles de mantener si tu organización crece en el futuro y necesitas añadir más usuarios. Añadir nuevos usuarios o recursos a una red cerrada requiere importantes ajustes en la propia infraestructura de red, lo que puede provocar tiempos de inactividad o, peor aún, una red dañada o en peligro.
Naturalmente, esto nos lleva a pensar en el coste de mantener una red cerrada. Implementar una puede ser más caro y menos rentable para las organizaciones más pequeñas. Se necesitarían hardware y software especializados para satisfacer las demandas de una red cerrada, lo que puede sobrecargar tus presupuestos de TI.
Redes cerradas vs. redes abiertas
En una red abierta, todos los usuarios pueden acceder a los datos de la infraestructura independientemente de su ubicación o rol. Aquí, los participantes pueden entrar y salir libremente de una red, lo que permite una mayor colaboración en equipo. Hemos creado una sencilla tabla comparativa para destacar las principales diferencias.
| Característica | Red cerrada | Red abierta |
| Definición | Red restringida | Red de acceso público |
| Control de acceso | Requiere permisos, contraseñas y autenticación de usuario | Restricciones mínimas o nulas |
| Seguridad | Alta seguridad | Potencialmente menos seguro |
| Ejemplos | Intranets corporativas privadas, redes militares, Wi-Fi seguro | Wi-Fi público |
| Casos de uso | Adecuado para datos sensibles y comunicaciones seguras | Ideal para compartir información pública y colaboración abierta |
| Propiedad | Interlocutores internos | Libre acceso |
| Rendimiento | Consistente y predecible debido a la limitación de usuarios | Puede variar en función del tráfico y el uso |
¿Cuál es mejor: red cerrada o red abierta?
Elegir entre una red cerrada y una abierta depende de las necesidades específicas de tu empresa. Las redes cerradas son ideales para entornos en los que la seguridad, la privacidad y el acceso controlado son fundamentales. Ofrecen un entorno seguro para los datos sensibles, como la información personal identificable(PII), pero pueden ser menos flexibles y difíciles de ampliar.
Las redes abiertas, en cambio, son más adecuadas para fomentar la colaboración y la innovación. Aunque ofrecen mayor flexibilidad y escalabilidad, también conllevan mayores riesgos de ciberseguridad.
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