El almacenamiento de conexión directa, a menudo conocido como DAS, es un tipo de sistema de almacenamiento digital. Este artículo pretende arrojar luz sobre esta tecnología, sus funciones, ventajas e inconvenientes, y su comparación con sistemas de almacenamiento como la red de área de almacenamiento (SAN) y almacenamiento en red (NAS).
¿Qué es el almacenamiento de conexión directa?
El almacenamiento de conexión directa es un sistema de almacenamiento digital que se conecta directamente a un ordenador o servidor sin tener que hacerlo a través de una red de datos. Puede ser interno, como un disco duro dentro de un ordenador, o externo, como un disco duro o una unidad de estado sólido que se conecta al ordenador mediante un cable.
¿Cómo funciona?
En un sistema de almacenamiento de conexión directa, el dispositivo está directamente conectado al ordenador o servidor. El sistema operativo del ordenador lo reconoce como una unidad adicional, lo que permite acceder a los datos y almacenarlos directamente en el dispositivo. La velocidad y eficacia de la transferencia de datos dependen del tipo de conexión utilizada, que puede ser Serial Attached SCSI (SAS), Serial ATA (SATA) o USB.
Ventajas e inconvenientes
Ventajas
- Rapidez y eficacia: el almacenamiento de conexión directa funciona a altas velocidades de transferencia de datos porque está directamente conectado al ordenador o servidor, garantizando un acceso rápido y eficaz a los datos, sin latencia de red.
- Rentabilidad: suelen ser menos caros en comparación con otras soluciones de almacenamiento como SAN o NAS. Esto convierte al DAS en una opción popular para pequeñas empresas u organizaciones con presupuestos ajustados.
- Facilidad de uso: como se conecta directamente al ordenador o servidor, suele ser más fácil de instalar y gestionar. No es necesario realizar complejas configuraciones de red, lo cual simplifica el proceso general de configuración y mantenimiento.
Desventajas
- Escalabilidad limitada: a diferencia de las soluciones de almacenamiento basadas en red, el DAS tiene un espacio de almacenamiento finito y puede resultar problemático cuando las necesidades de almacenamiento de datos superan su capacidad. Ampliar el almacenamiento en un sistema DAS suele implicar añadir más discos duros, lo que puede resultar incómodo y costoso con el tiempo.
- Menos flexibilidad: los datos están vinculados al ordenador o servidor específico al que están directamente conectados. Esto significa que compartir datos entre varios sistemas o usuarios puede ser complicado, lo que limita la flexibilidad de la gestión de datos.
- Posible pérdida de datos: en una configuración DAS, si falla el servidor o el ordenador al que está conectado, existe un alto riesgo de pérdida de datos. El almacenamiento de conexión directa puede ser vulnerable a fallos de hardware sin las medidas de protección que pueden ofrecer los sistemas de almacenamiento basados en red, como la redundancia de datos.
DAS vs. SAN vs. NAS
Mientras que DAS se conecta directamente a un ordenador o servidor, SAN y NAS son sistemas de almacenamiento basados en red. SAN, o red de área de almacenamiento, proporciona almacenamiento a nivel de bloque y se conecta a través de una red de alta velocidad. NAS, o almacenamiento conectado a la red, proporciona almacenamiento a nivel de archivos y está conectado a una red informática.
SAN y NAS ofrecen más flexibilidad y escalabilidad que DAS y permiten que varios ordenadores o servidores accedan al mismo almacenamiento. Sin embargo, su instalación y gestión pueden resultar más complejas. En cuanto a la velocidad, el DAS suele ofrecer tasas de transferencia de datos más rápidas porque no tiene que lidiar con el tráfico de red.
La utilidad del DAS
El almacenamiento de conexión directa es una solución de almacenamiento sencilla y rápida, ideal para situaciones en las que el acceso a datos de alta velocidad es fundamental y no es necesario compartir datos entre varios sistemas. Sin embargo, para entornos que requieren soluciones de almacenamiento flexibles y escalables, los sistemas de almacenamiento basados en red, como SAN y NAS, pueden resultar más adecuados. Comprender las diferencias entre estas opciones de almacenamiento puede ayudar a tomar una decisión informada que satisfaga mejor las necesidades específicas de almacenamiento.